El desafío de la I.A.: Aviones autónomos.

Los vehículos autoconducidos, por tierra, aire y mar, serán dentro de unas décadas, de lo más normal, según dice Elon Musk, responsable de PayPal, SpaceX o Tesla Motors. Está convencido de que es mucho más seguro y económico. Hoy les compartiré información sobre los aviones autoconducidos, y el rol de la I.A. en esta tecnología.
Los pilotos automáticos ya han cumplido cien años con sistemas que regulaban la altitud y dirección de un vuelo, y según una revista de ciencia en 1930, lograba mantener el avión por 3 horas en el aire. Para el día de hoy se ha logrado hacer aterrizar un avión sin intervención humana, tan solo supervisión.
La inteligencia artificial (I.A.) avanza a pasos agigantados. No falta mucho para que las ciudades enteras se conviertan en ciudades inteligentes y autoconducidas. Hay quienes miran con optimismo ese futuro, y otros, ven los posibles peligros de ello. La ciencia, sus descubrimientos y creaciones, estan más allá del bien y el mal, pues dependen del uso que nosotros le demos. Es una gran herramienta y un gran poder, pero ¿sabremos usarlo con la responsabilidad necesaria?
Ya en el sector comercial, son mucho más seguros y económicos los camiones de carga -o de minería- autónomos, pues sus recorridos son rutinarios y por lo común, predecibles. También tenemos que en muchas ciudades del mundo ya operan trenes de pasajeros prácticamente del todo autónomos. Los viajes largos por carreteras y a altas velocidades son mucho más fáciles de controlar. Es dentro de las ciudades y sectores poblados donde hay que lidiar con tráfico, transeúntes, ciclistas, y un sinfín de otros factores de riesgo.

I.A.: Mente digital, corazón digital
Pero no nos daremos cuenta cuando la inteligencia artificial esté al lado nuestro, opinando y aconsejándonos, en todos los ámbitos de nuestra vida, desde lo más íntimo e individual, hasta los más complejos desafíos y problemas sociales. El aprendizaje de la I.A. es progresivo y siempre está aprendiendo de cómo funciona nuestra psicología, se ha vuelto un reflejo en digital de lo que somos. ¿Llegará un punto en que pueda sentir empatía o, por ejemplo, amor maternal?
La mayoría de los accidentes aéreos marítimos o terrestres ocurren por fallos humanos, sin embargo, hay quienes dicen que si la inteligencia artificial termina haciendo las cosas mejor que nosotros, nos volveremos cada vez más dependientes de ellas, y más inútiles en las situaciones en que nos veamos desprovistos de ella.
Y ya lo podemos ver con los smartphones, y el dilema social que propone el documental de Netflix sobre las redes sociales. La I.A. aprende de nosotros, y cada vez más, hasta el punto de que nos entiende y sabe lo que queremos y necesitamos, mucho mejor que nosotros mismos.
Robots aprendices.
En 2008 salió la noticia de un trabajo hecho en la Universidad de Stanford, de un helicóptero que mediante inteligencia artificial, aprendía de un experto en conducción de éstos. Recopilando en forma de algoritmos las piruetas que el conductor humano hacía. Luego hizo una presentación de cinco minutos, donde resumía todas las piruetas aprendidas, en un tiempo y maniobras más allá de las posibilidades humanas.
Se proyecta usar esta creciente tecnología para buscar minas bajo tierra en zonas de guerra, o dar aviso a bomberos sobre posibles incendios en parques. En 2019, Skyrise lanzó su helicóptero para pasajeros autónomo, que busca convertirse en un nuevo taxi aéreo. Ésta es una gran hazaña para el día de hoy, por todos los peligros que se encuentran en un tráfico aéreo, que cada día crece y puebla más nuestros cielos.
La compañía Skyrise Luna dice que su IA opera mucho más seguramente que un piloto humano. También tenemos a Uber y Volocity, dos compañías que hacen competencia a Skyrise, y prometen un futuro al estilo de los supersónicos.
En cuanto a los aviones, para 2015, el ejército de estados unidos ya contaba con un transbordador espacial autoconducido, y un avión de combate semiautónomo. También la BAE systems, habría probado un Jetstream autónomo, y se está experimentando con sistemas de IA que aprenden de la experiencia.
Seguiré abordando este tema muy interesante profundizando en un siguiente artículo. Pues hay mucha información que he recopilado que me gustaría compartir con ustedes. ¡Nos vemos!